4. Que aquellos que buscan matarme sean humillados y despreciados. Que retrocedan avergonzados los que traman mi ruina.No temerás los terrores de la Confusión, ni la flecha que vuela de día, ni la peste que acecha en las tinieblas, ni la plaga que devasta a pleno sol.Al reflexionar sobre sus palabras, descubrimos la profundidad de la relación c